LECHE MATERNA PREVIENE ENFERMEDADES CRÓNICO DEGENERATIVAS

Las fórmulas lácteas de ninguna manera sustituyen la leche materna. La utilización de estos productos encierra el riesgo de provocar alergia a la proteína de la leche de vaca.

La doctora Adriana Guillen Chávez, médico pedíatra del Hospital de Ginecología y Obstetricia (HGO) número 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tijuana,  explicó que se trata de un padecimiento se presenta hasta en 15 por ciento de los lactantes.

Además, advirtió que el uso de fórmulas aumenta el riesgo de alergia alimentaria simple como cólicos, reflujo y ronchas;  rinitis y asma; enfermedades infecciosas, muerte de cuna y obesidad.  Agregó que aunque son auxiliares para el crecimiento del infante, su uso no está libre de riesgos por lo que se debe consultar al pedíatra cuál es la más adecuada para el bebé.

La doctora Guillén Chávez, puntualizó que con  base en estudios de reconocimiento internacional, es evidente que la leche materna además de brindar protección contra infecciones, promueve el óptimo desarrollo cerebral, ya que los bebés alimentados con pecho tienen un coeficiente intelectual mayor que aquellos a quienes se les proveen fórmulas.

Permite un mejor desarrollo facial ya que disminuye la necesidad de tratamientos de ortodoncia al llegar a la adolescencia, reduce el riesgo de ciertos cánceres como leucemia y de enfermedades metabólicas como obesidad, diabetes, colesterol alto y coronarias.

Evitar las fórmulas lácteas, indicó, repercute de manera importante en la economía familiar y permite al resto de la familia involucrarse en las tareas de la casa o mientras la madre amamanta. Se tienen registros de un menor ausentismo laboral por parte de las madres trabajadoras que amamantan ya que sus hijos se enferman menos.

Como prueba de ello, explicó, la leche en polvo para bebé tiene aproximadamente 350 componentes entre, azúcares, proteínas, grasas minerales y vitaminas, mientras que en la materna se han identificado más de 1 mil 500 componentes, cada uno completamente natural y con funciones específicas de nutrición y protección.

La especialista del Seguro Social aclaró que son raros los casos en los que la lactancia está contraindicada, la principal es en hijos de madres con VIH,   tuberculosis activa, con enfermedades metabólicas, bajo tratamiento de quimioterapia o con medicamentos para padecimientos psiquiátricos como el litio.

Explicó que en los hospitales del Instituto se promueve el alojamiento conjunto, que el recién nacido se encuentre en la misma habitación con su madre para amamantar a libre demanda. No se utilizan biberones ni chupones para no confundir al niño, además de promover el contacto físico para fortalecer los lazos emocionales y afectivos entre madre e hijo.