“HABLÓ DE MÁS” DICE EL ASESINO DE VALERIA

Mexicali.-“Esto tiene que pasar porque habló de más, soltó la lengua”, dijo Sergio Enrique “N” a un testigo presencial del presunto feminicidio de Valeria Ahumada Jáuregui. Esto fue desahogado por el Ministerio Público en la audiencia de Vinculación a Proceso en contra de Sergio Enrique “N”, celebrada la mañana de ayer en el Centro de Justicia, presidida por la juez Sara Perdomo Gallegos.

De nueva cuenta la sala de audiencias se encontraba llena por familiares y otras personas, quienes clamaban justicia ante la muerte de la joven madre, algunos portando playeras con la leyenda “Ni Una Menos”.

De acuerdo al testimonio de Óscar Manuel Córdova Martínez, testigo presencial de los hechos, la noche del sábado 14 de abril, Sergio Enrique lo intentó contactar pidiendo un “raite”. Fue cerca de las 05:00 horas, ya del domingo 15, cuando a bordo de su unidad Infiniti arribó al domicilio en Villas del Colorado, donde fue abordado por Sergio Enrique para llevar a Valeria a su hogar.

Córdova Martínez testificó que ambos subieron en la parte trasera, donde discutieron, hasta que el imputado dijo: “Me vas a decir o no, no estoy jugando”, mientras la agredía en brazo y cuello. Durante el trayecto, Sergio Enrique dio indicaciones a Córdova Martínez para que se frenara frente a una farmacia, lugar dondese presume adquirió guantes de látex.

La unidad arribó hasta Lomas de Abasolo, donde Sergio Enrique tenía un amigo, quien vivía frente a un Preescolar ubicado sobre avenida Sierra San Lázaro, a donde arribaron. Debido a que la discusión de ambos continuaba, Córdova Martínez decidió dejarlos solos y acudió a una tienda ubicada a unos cuantos metros del lugar donde compró cigarros y fumó dos.

Cerca de las 07:00 horas, al regresar a su vehículo, encontró a Sergio Enrique ahorcando a Valeria, quien estaba con cara al techo y la cabeza fuera de vehículo. Relató el Ministerio Pú- blico que Córdova Martínez pateó a Sergio Enrique, diciéndole que se dejara de “ondeadas”, a lo que éste respondió: “Esto tiene que pasar porque habló de más, se le soltó la lengua”.

Cuando Córdova Martínez intentó buscar un objeto para proteger a Valeria, notó que ella sangraba de la nariz y cuello, además de que no reaccionaba, quedando paralizado ante lo ocurrido.

DEJA EL CUERPO

En ese momento, Sergio Enrique bajó el cuerpo de la joven y arrastrándolo de los brazos la metió a una casa en obra negra, donde se dijo que procedió a golpearla con un trozo de concreto. En un suéter que tenía Sergio colocó los guantes, el pedazo de cemento y vi- drio, para envolverlos y procedió a retirarse, junto a Córdova Martínez, con rumbo hacia el fraccionamiento El Cóndor.

El Ministerio Público explicó que en el trayecto, Sergio Enrique reiteró que lo hecho fue debido a que Valeria había hablado de más, sin referir sobre qué cosa. Además, mantuvo amenazado a Córdova Martínez si decía algo a la autoridad.

Fue al recorrer un camino de terracería donde Sergio Enrique arrojó de la unidad el suéter con la evidencia usada para matar a la joven. Este fue el testimonio más fuerte que presentó la Fiscalía, por lo que la juez determinó que había pruebas suficientes hasta este punto para vincular a proceso a Sergio Enrique.