México. -Los Simpsons predijeron el fiasco mediático del rescate de la inexistente niña “Frida Sofía”.

 

Durante las 48 horas posteriores al sismo del pasado 19 de septiembre, buena parte de los mexicanos estuvimos al pendiente de los supuestos intentos de rescate de una niña conocida como Frida Sofía “N”, supuestamente atrapada debajo de los escombros del Colegio Rébsamen, trágimente colapsadodespués del movimiento telúrico.

La versión de la existencia de Frida Sofía surgió en medio de las labores de rescate -de momento desconozco bien a bien de donde- y se propagó como reguero pólvora, siendo difundida por rescatistas, elementos de las fuerzas armadas, usuarios de redes sociales e incluso medios masivos como SDP Noticias y Televisa.

Sobre la niña “Frida” se decía que estaba bien, que había movido las manos, que estaba debajo de un escritorio resistente “de hormigón”, que había bebido agua, que reconocía a otros cinco sobrevivientes a sus alrededores, que tenía 5 u 11 años, en fin.

Quienes hemos estado al pendiente de la información sobre el sismo en redes sociales y medios tradicionales nos enteramos de todos estos “datos” sobre la niña que penosamente nadie verificó, nadie corroboró, pero que prácticamente todo el mundo difundió ¿Y en busca de qué? De un milagro, de una redención, de algo de esperanza en medio de la tragedia del sismo que dejó cientos de muertos, personas sin hogar y una cantidad incuantificable de daños económicos.

Hasta Aurelio Nuño, titular de la SEP, entró a este juego macabro de Frida, apareciendo sorprendido y consternado en medios señalando que ni él, ni la Policía Federal, ni la Marina habían podido contactar a los padres o familia de Frida Sofía.

Ahora sabemos que Frida Sofía no existe. Y que la atención mediática excesiva que muchos medios pusieron y pusimos en el tema le restó reflectores a otros lugares que están en situación crítica, como Xochimilco, Jojutla y varias zonas afectadas por el sismo del 8 de septiembre.

Este penoso asunto de hecho ya fue comparado en redes sociales con aquel capítulo clásico de los Simpsons en donde todo Springfield y gente del extranjero se movilizaron para “rescatar” a Timmy O’Toole, un desdichado niño presuntamente atrapado en un pozo, que en realidad era una broma pesada de Bart Simpson.

¿Por qué nos tragamos este fiasco de Frida Sofía, como espectadores y como medios? Creo que nos fuimos por el melodrama fácil derivado de tanto ver telenovelas y series malas de Netflix, como buenos mexicanos. Queríamos ver el final feliz… un concepto que no existe realmente en la vida real.

En México, frente a la tragedia, no necesitamos ningún milagro como el de “Frida Sofía”. El verdadero milagro fue la unión de la gente, los voluntarios apoyando desinteresadamente, la gente haciendo cadena humana en plena lluvia torrencial, los más pobres dando todo lo que tienen como donativo.

Y ante la inexistencia de Frida Sofía, debemos alegrarnos por la existencia de la solidaridad, la hermandad. la valentía y