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TERTULIA POLÍTICA

Espejismo priísta\r\n\r\nPedro MARTÍNEZ SERRANO\r\n\r\nEn Baja California, los candidatos del Partido Revolucionario Institucional al senado de la República enfrentan un espejismo estúpido, en el que sustentan su esperanza de triunfo. Hacen campaña confiados en que el efecto Enrique Peña Nieto les abonará prosélitos a su causa. Nada más equivocado. En la entidad más norteña del país, ni el mexiquense tiene el triunfo asegurado.\r\nLa fórmula de candidatos al senado de la República, por el Revolucionario Institucional, exhibe una pobreza vergonzante, como si no tuvieran mejores activos. Echaron mano de lo peorcito de que disponen.\r\nEl senador Fernando Castro Trenti impuso su voluntad y, de paso, se benefició en dos sentidos: echó por tierra la intención de Jorge Hank Rhon de meter a su esposa, Elvia Amaya como candidata al senado y, segunda, reforzó los hilos con los que maneja cual marioneta sin voluntad propia y, lógico, sin el más menor sesgo de inteligencia al periodista de pacotilla Eligio Valencia Roque.\r\nEl espejo en el que se reflejan los priístas que aspiran a ocupar cargos de elección popular, especialmente los candidatos al senado, el ex prófugo de la justicia (cuyo hecho me tocó atestiguar y, por ende conozco a la perfección) Eligio Valencia Roque y Nancy Sánchez Arredondo los engaña. Olvidan que los panistas cuando se unen, nadie les gana.\r\nLa elección local anterior, en la que ganaron los cinco ayuntamientos, ellos, los priístas, lo saben, sólo los que se hacen pendejos, los mesiánicos, como Fernando Castro y sus bufones, fue consecuencia de que el panismo bajacaliforniano navegó sobre naves de soberbia, de golpes bajos. La división y la traición fue su signo.\r\nHoy no ocurre lo mismo. La cúpula nacional panista, disponen de encuestas que los colocan, al menos en la contienda por el Senado, cuando menos 15 puntos arriba de los priístas y, 12 de las llamadas izquierdas. En concreto: Ernesto Ruffo tiene una ventaja de 37 puntos; Elio Valencia Roque, 22 y; Marco Antonio Blazques, roza los 20 puntos; el resto son indecisos que pueden votar por cualquiera, menos por el PRI y lo que hoy representa, con Eligio como abanderado.\r\n\r\nAún más:\r\nEn la oficina de Luis Videgaray, coordinador nacional de la campaña de Enrique Peña Nieto, hay un serio malestar con el trabajo que se realiza en Baja California. Pura simulación, dice Erwin Lino, secretario particular del candidato presidencial, su hombre de confianza.\r\nLa semana anterior, el jueves para ser exactos, se evaluó el trabajo de las coordinaciones estatales y la peor evaluada, sólo similar a la del estado de Guerrero (perredista), fue la de Baja California, en donde el trabajo estatal corre a cargo del remedo de judío, David Saúl Guakil. Es más, ya ni el teléfono le responden a su representante en el Estado. Para escuchar mentiras, disculpas y pendejadas, para que se pierde el tiempo con ese sujeto, dijo a uno de sus colaboradores más cercanos el señor Lino.\r\n\r\nAnte la estupidez con que se conduce el corre ve y dile de Castro Trenti y Jorge Hank, David Saúl, me aseguran que a fines de la semana próxima se enviará a un nuevo coordinador de campaña de Peña Nieto en la entidad que, en primer término llegará como delegado y, en el corto plazo, dará las gracias a Saúl Guakil y a su comparsa.

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